
La
hipersudoración (o hiperhidrosis) hace referencia a un exceso de
sudoración que se localiza generalmente en las palmas de las manos,
plantas de los pies y axilas, aunque también puede darse en otras partes
del cuerpo como en la cabeza y el rostro. Actualmente los pacientes que
sufren este tipo de problemas, que aproximadamente es el 1% de la
población, ven afectada su personalidad al fomentar la sensación de
inseguridad y timidez.
Para todos estos casos, El Botox se presenta como la única alternativa no quirúrgica que consigue interrumpir la hiperactividad de las glándulas sudoríparas. Para ello, el producto se infiltra en la zona afectada a través de una aguja extremadamente fina.
Se trata de un procedimiento altamente tolerado ya que sólo se contraindica en el caso de embarazo o lactancia, enfermedad neuromuscular grave o pacientes con coagulopatías o en tratamiento anticoagulante.
En el resto de casos, el Botox se presenta como un proceso seguro y de demostrada eficacia, que mejora la calidad de vida del paciente.
Para todos estos casos, El Botox se presenta como la única alternativa no quirúrgica que consigue interrumpir la hiperactividad de las glándulas sudoríparas. Para ello, el producto se infiltra en la zona afectada a través de una aguja extremadamente fina.
Se trata de un procedimiento altamente tolerado ya que sólo se contraindica en el caso de embarazo o lactancia, enfermedad neuromuscular grave o pacientes con coagulopatías o en tratamiento anticoagulante.
En el resto de casos, el Botox se presenta como un proceso seguro y de demostrada eficacia, que mejora la calidad de vida del paciente.